Trincheras de la Guerra Civil Española:  durante el transcurso del conflicto bélico del año 1936, en un primer avance, las fuerzas sublevadas ocuparon los altos de Amporreta e Itturritxipi, pero al ver frenado su ataque por las tropas leales, el frente se estabilizó en éste lugar durante siete largos meses, durante los cuales ambas fuerzas cavaron numerosas trincheras y defensas a lo largo de estos montes, algunas de las cuales pueden apreciarse aún hoy día.

Haizeola y escoriales: en la cima de Epele se han encontrado restos de una haizeola. Estos hornos situados en los montes eran de pequeño tamaño, de unos 60 centímetros de ancho y 150 de altura, con la base excavada en el suelo y paredes hechas de barro. Los minerales de hierro extraídos de las minas –calcinados y desmenuzados- los introducían en estos hornos circulares junto a carbón de madera o madera, esto es, se transformaban el mineral y extraían el hierro para utilizarlo después en las fábricas. La inyección de aire se hacía mediante fuelles accionados a mano. Los desechos de este proceso forman los escoriales. No sabemos exactamente cuando se empezaron a utilizar estos hornos, pero según las dataciones esta haizeola de Anporreta se utilizaba en la segunda mitad del siglo XIII, cuando fue sustituido por un sistema innovador: las ferrerías hidráulicas. Éstos se situaban más cerca del núcleo urbano, a extramuros.

Manantial de Urzulo: antes de la construcción del pantano de Urkulu este era el manantial principal con el que se abastecía Arrasate. Para llegar allí hay que desviarse 100 m de la ruta.

Ermita de San Balerio: aunque no sabemos cuándo y quién lo construyó, parece que su origen se pierde en los primeros siglos de nuestra era. Aunque cumplió las funciones de iglesia, también era la sede de la cofradía de los mineros de San Balerio, desde que se creó en 1434 hasta que desapareció en 1958. Dentro de la ermita son llamativas la bóveda policromada y el retablo. Según cuenta la tradición, dando tres vueltas al retablo en sentido de las agujas del reloj se curan los dolores de cabeza.

Parque de San Balerio: este terreno, unido a la ermita del barrio, era de la cofradía. En un tiempo había viñedos allí, y el dulce vino producido se repartía el día de San Balerio. El terreno fue comprado por el ayuntamiento en 2004 y desde entonces se han realizado trabajos para la recuperación del bosque.

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